La medida ha caído muy bien entre la población hospitalaria. "Mucho mejor. Yo de las pastillas que me traen estas señoritas no me fío. En casa siempre tomo con la comida una pastilla verde, media de las blancas y una roja, y las de aquí son todas blancas" comentaba Merche, paciente ingresada en el Hospital La Paz de Madrid tras ver la noticia.Por su parte, las supervisoras de enfermería de las unidades de hospitalización han salido a la calle en defensa de los pacientes: "Llevamos meses pidiendo al portavoz del Ministerio que permita la medida. No hay pastillas como las de casa, que una las lleva en el bolso y al final termina cogiéndoles cariño". La única enfermera que ha querido hacer declaraciones al respecto se ha mostrado contundente: "Total, ya nunca había de nada en el stock..."
